El proyecto agro-alimentario del Pago de Aylés comenzó su andadura en 1994 con la compra de la finca por parte del propietario actual, la familia Ramón, reunificando diversas propiedades que desde la Edad Media habían pertenecido al clero y a la nobleza, convirtiéndose así en una de las tres fincas históricas privadas más grandes de Aragón, con más de 3.100 hectáreas de extensión con todo el perímetro vallado.
Localizados a tan sólo 35 kilómetros al sur de la ciudad de Zaragoza, la finca se erige como un impresionante paraje repleto de contrastes que atraviesa el río Huerva, que dibuja espectaculares barrancos ante la inalterable presencia del monte San Pablo.
Tierras arcillosas, calizas y calcáreas acogen las más de 3000 hectáreas de terreno perimetrado de la finca. Sin embargo, pocas viñas centenerarias sobrevivieron en la finca y en 1995 se plantan 75 hectáreas de variedades tintas autóctonas como la Garnacha y la Tempranillo y variedades internacionales como la Cabernet Sauvignon y la Merlot.
|