El nombre de Casares está ligado al mundo del vino desde que en 1988 abrió sus puertas Casares Vinoteca, quien desde entonces se ha convertido en el auténtico templo del vino en León.
Desde este momento es referente de la provincia en vinos nacionales y de importación. Cuando Casares Vinoteca abre sus puertas apenas entendían de vino poco más que los propios viticultores y bodegueros.
Conserva el regusto de la tienda familiar que fue desde 1961, cuando el patriarca, Felisindo Casares, abría en República Argentina un ultramarinos que abasteció al barrio hasta su jubilación. Y cuando sus hijos parecían destinados a continuar la tradición familiar, llega el más joven Miguel Ángel Casares y decide reconvertir el negocio familiar en una vinoteca.
Miguel Ángel Casares, puso su empeño en convencer a su padre de darle un giro al negocio; tanto que logró doblegar la voluntad del patriarca, partidario de modificar el concepto de la tienda con la venta de delicatesen -vino incluido-, pero que no lograba ver el futuro en la especialización que el benjamín pretendía. La tenacidad del descendiente consiguió dar un cambio profundo al negocio, que abrió sus puertas con sus estantes ocupados únicamente por vinos en el año 1988, a la jubilación del progenitor.
Jesús Casares ayudaba al hermano en el negocio en las tardes libres, hasta que en 1990 se dedicó a la vinoteca a tiempo completo. (1)
En 1990 se constituye Casares Centro Vino, empresa especializada en la distribución de vinos de calidad.
Somos distribuidores de las bodegas más representativas y más significativas de las distintas denominaciones de origen.
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